Paciencia y resiliencia.
Super poderes que ayudaran a tu familia en esta cuarentena.
Hace unos días durante este #quédate en casa, estaba pensando sobre como quisiera que abriera los ojos y todo ya hubiera pasado, darme cuenta que todo estaba como siempre y que había sido un mal sueño todo lo del COVID-19. Momentos mas tarde mi hijo se acerca y me dice "Ya sé lo que podemos hacer al rato, podemos sembrar semillas y ahora si vamos a poder cuidarlas y ver como crecen cada día hasta que salga la planta". Fue en ese instante cuando escuche más que una actividad sugerida, en realidad me hizo ver que era tiempo de aprovechar la oportunidad de haber parado la cotidianidad y esperar con inteligencia.
En 2020 estamos encontrándonos en situaciones que no pensamos al iniciar el año, se han cambiado los planes de todos y tenemos que aprender a hacer con lo que tenemos.
Nuestros hijos están acompañandonos y aprendiendo de lo que ven, de como actuamos y lo que elegimos hacer.
Así que estamos ante la posibilidad de enseñarles superpoderes para actuar en situaciones de crisis.
En estos días las palabras más escuchadas son crisis , miedo, incertidumbre y en el mejor de los casos reinventarse, aprender y poner en acción.
Debemos ocuparnos de darles herramientas a nuestros hijos que sepan cómo actuar en tiempos difíciles cuando las cosas no están en sus manos.
Yo les propongo dos superpoderes que les ayudaran a lo largo de la vida: Paciencia y resiliencia.
La paciencia es la capacidad del ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien.
Nos hemos acostumbrado a vivir en un ritmo muy acelerado, los días parecían no alcanzarnos para hacer tantos pendientes, pero hoy la vida nos lleva a hacer una pausa y poner las cosas en una balanza, es nuestra oportunidad de darle tiempo a nuestra familia.
Esta pausa la podemos ver como una gran oportunidad y le sacaremos mucho provecho.
La impaciencia se conecta con estrés, ansiedad y descontrol. Lo alimentamos con malas noticias, complicaciones dormir y en conclusión enfado, desánimo y desesperación.
La paciencia nos permite actuar conscientes de la situación pero sabiendo que exaltando los problemas no conseguiremos ni aceleramos la solución, por el contrario, lo que se hace más evidente incluso se ve mas grande, es el problema.
¿Cómo podemos trabajar la paciencia?
*Meditar
*Practicar ejercicios de respiración.
*Ser conscientes de que nosotros elegimos nuestro estado de ánimo. Visualizar cómo queremos sentirnos y vernos en ese momento.
¿Cómo podemos trabajar la resiliencia?
*Agradece lo que tienes
*Acepta el cambio, lo único seguro en la vida es el cambio.
*Identifica las ventajas que te presenta la situación complicada.
La neurociencia nos dice que aprendemos el 10% de lo que leemos, el 20% de lo que escuchamos, el 30% de lo que vemos, 70% de lo que discutimos con otros y el 80% de lo que hacemos.
Así entonces el paso 1 es comenzar a practicar nosotros acciones que nos lleven a vivir con paciencia y resiliencia,
Nuestros hijos nos imitaran y reforzaremos esas conductas con actividades específicas para ellos. Las actividades manuales, como punteado, delineado, la costura, armar rompecabezas, coloreado o dibujar, son excelentes opciones para este objetivo.
El punto es que cuando encontremos un punto de frustración vayamos respirando, ubicando el conflicto y viendo las posibles alternativas de solución así elegir la opción más oportuna y nosotros, los padres que en ese momento somos sus guías, mostrarnos muy tranquilos y pacientes mientras llega al resultado final.
Si seguimos y practicamos continuamente estas recomendaciones estaremos dotando de superpoderes a nuestra familia que nos serviran hoy y nos darán una mejor calidad de vida mañana.
Super poderes que ayudaran a tu familia en esta cuarentena.
En 2020 estamos encontrándonos en situaciones que no pensamos al iniciar el año, se han cambiado los planes de todos y tenemos que aprender a hacer con lo que tenemos.
Nuestros hijos están acompañandonos y aprendiendo de lo que ven, de como actuamos y lo que elegimos hacer.
Así que estamos ante la posibilidad de enseñarles superpoderes para actuar en situaciones de crisis.
En estos días las palabras más escuchadas son crisis , miedo, incertidumbre y en el mejor de los casos reinventarse, aprender y poner en acción.
Debemos ocuparnos de darles herramientas a nuestros hijos que sepan cómo actuar en tiempos difíciles cuando las cosas no están en sus manos.
Yo les propongo dos superpoderes que les ayudaran a lo largo de la vida: Paciencia y resiliencia.
¿Que es la paciencia?
La paciencia es la capacidad del ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien.
Nos hemos acostumbrado a vivir en un ritmo muy acelerado, los días parecían no alcanzarnos para hacer tantos pendientes, pero hoy la vida nos lleva a hacer una pausa y poner las cosas en una balanza, es nuestra oportunidad de darle tiempo a nuestra familia.
Esta pausa la podemos ver como una gran oportunidad y le sacaremos mucho provecho.
La impaciencia se conecta con estrés, ansiedad y descontrol. Lo alimentamos con malas noticias, complicaciones dormir y en conclusión enfado, desánimo y desesperación.
La paciencia nos permite actuar conscientes de la situación pero sabiendo que exaltando los problemas no conseguiremos ni aceleramos la solución, por el contrario, lo que se hace más evidente incluso se ve mas grande, es el problema.
Mahatma Gandhi decía:
“El que pierde la paciencia, pierde la batalla”.
Si nos damos la oportunidad de frenar nuestro pensamiento, de ver las cualidades de la situación y la enfrentamos con tranquilidad, pensando en el presente , viviendo con plenitud cada momento, disfrutando de las cosas sencillas, del amanecer, de un desayuno con nuestros hijos de ver una película juntos, de conversar nuestros anhelos e interrogantes , podemos estar seguros que hacemos lo mejor que en este momento podemos hacer.
Conectar con nuestro corazón y hacer lo que nos haga sentir más plenos.
Eso es lo que nuestros hijos deben aprender, esperar con tranquilidad y acción basada en el presente, la paciencia no solo es asumir la situación es esperar con buena actitud.
Si paramos y nos permitimos ver la situación desde diferentes ángulos podemos encontrar un punto de reflexión y buscar la forma de pasar ese periodo de la mejor manera.
¿Qué es la resiliencia?
Resiliencia es la capacidad de sobreponerse a momentos críticos y a adaptarse ocupando sus fortalezas.
Si bien la paciencia es saber esperar durante un momento complicado de la mejor manera, la resiliencia es el siguiente paso a vivir aprendiendo de esa experiencia y para reinventarnos.
Por ejemplo: Teníamos un inicio de día a las 6 de la mañana para prepararse a la escuela, hoy a las 6 resulta ser temprano y no nos disponemos a salir por lo que sin problema podremos ajustar nuestro horario a nuevas actividades que nos alegren el día y nos hagan más fuertes tanto física como emocionalmente; sabiendo que será por un tiempo indeterminado que no depende de nosotros directamente. Hacemos lo que está en nuestras manos para vivir mejor.
“El que pierde la paciencia, pierde la batalla”.
Si nos damos la oportunidad de frenar nuestro pensamiento, de ver las cualidades de la situación y la enfrentamos con tranquilidad, pensando en el presente , viviendo con plenitud cada momento, disfrutando de las cosas sencillas, del amanecer, de un desayuno con nuestros hijos de ver una película juntos, de conversar nuestros anhelos e interrogantes , podemos estar seguros que hacemos lo mejor que en este momento podemos hacer.
Conectar con nuestro corazón y hacer lo que nos haga sentir más plenos.
Eso es lo que nuestros hijos deben aprender, esperar con tranquilidad y acción basada en el presente, la paciencia no solo es asumir la situación es esperar con buena actitud.
Si paramos y nos permitimos ver la situación desde diferentes ángulos podemos encontrar un punto de reflexión y buscar la forma de pasar ese periodo de la mejor manera.
¿Qué es la resiliencia?
Resiliencia es la capacidad de sobreponerse a momentos críticos y a adaptarse ocupando sus fortalezas.
Si bien la paciencia es saber esperar durante un momento complicado de la mejor manera, la resiliencia es el siguiente paso a vivir aprendiendo de esa experiencia y para reinventarnos.
Por ejemplo: Teníamos un inicio de día a las 6 de la mañana para prepararse a la escuela, hoy a las 6 resulta ser temprano y no nos disponemos a salir por lo que sin problema podremos ajustar nuestro horario a nuevas actividades que nos alegren el día y nos hagan más fuertes tanto física como emocionalmente; sabiendo que será por un tiempo indeterminado que no depende de nosotros directamente. Hacemos lo que está en nuestras manos para vivir mejor.
*Meditar
*Practicar ejercicios de respiración.
*Ser conscientes de que nosotros elegimos nuestro estado de ánimo. Visualizar cómo queremos sentirnos y vernos en ese momento.
¿Cómo podemos trabajar la resiliencia?
*Agradece lo que tienes
*Acepta el cambio, lo único seguro en la vida es el cambio.
*Identifica las ventajas que te presenta la situación complicada.
¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos a que desarrollen la paciencia y la resiliencia?
La neurociencia nos dice que aprendemos el 10% de lo que leemos, el 20% de lo que escuchamos, el 30% de lo que vemos, 70% de lo que discutimos con otros y el 80% de lo que hacemos.
Así entonces el paso 1 es comenzar a practicar nosotros acciones que nos lleven a vivir con paciencia y resiliencia,
Nuestros hijos nos imitaran y reforzaremos esas conductas con actividades específicas para ellos. Las actividades manuales, como punteado, delineado, la costura, armar rompecabezas, coloreado o dibujar, son excelentes opciones para este objetivo.
El punto es que cuando encontremos un punto de frustración vayamos respirando, ubicando el conflicto y viendo las posibles alternativas de solución así elegir la opción más oportuna y nosotros, los padres que en ese momento somos sus guías, mostrarnos muy tranquilos y pacientes mientras llega al resultado final.
Si seguimos y practicamos continuamente estas recomendaciones estaremos dotando de superpoderes a nuestra familia que nos serviran hoy y nos darán una mejor calidad de vida mañana.
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